Los usuarios de vehículos eléctricos tendrán que pagar para recargar en el medio millar de puntos de recarga que la empresa pública municipal B:SM tiene en Barcelona, porque a partir del próximo lunes día 18 este servicio deja de ser gratuito.
En una entrevista en el programa ‘bàsics’, de betevé, el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Eloi Badia, ha explicado que las tarifas variarán según el tipo de usuario, pero habrá un abono de 50 euros anuales para los conductores particulares.
Badia ha señalado que el servicio de recarga «debía dejar de ser gratuito por ley», pero que los precios serán «competitivos» para consolidar la llegada del vehículo eléctrico y evitar frenar su expansión.
Para ello se han creado varias tarifas de recarga según el tipo de usuario, ya sean particulares, flotas profesionales o motos, y también si el punto de recarga es en un aparcamiento de B:SM o bien en la calle.
En todos los casos, habrá que hacer una recarga mínima que varía según el tipo de usuario y vehículo.
Para los usuarios particulares que utilizan el servicio habitualmente, se ha previsto un abono anual de 50 euros (25 euros el primer año) que se podrá compartir con dos familiares.
Si no se tiene el abono, cargar en la calle costará 0,49 euros/kWh, mientras que si se tiene el abono, el precio será de 0,40 euros/kWh.
Los precios son más baratos en los aparcamientos y también en horario nocturno: 0,35 euros/kWh con abono y 0,44 euros/kWh sin abono.
En el caso de los profesionales, el abono anual será de 100 euros (50 euros el primer año).
En este caso, el coste de cargar será de 0,40 euros/kWh en horario diurno y de 0,35 euros/kWh en horario nocturno para coches y furgonetas.
El precio es más económico en los aparcamientos y también para motos de flotas profesionales (0,30 euros/kWh en la calle en horario diurno).
