El número total de vehículos eléctricos en España se situó en 142.251 unidades al cierre de 2020, lo que representa un aumento del 70 % respecto a los 83.623 vehículos eléctricos que había el 2019 a pesar de la pandemia, según los datos de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive).

Así se extrae del «Análisis dinámico del presente y futuro de la movilidad eléctrica» presentado por esta asociación, que cifra en 101.557 el número de vehículos 100 % eléctricos, un 52 % más que en 2019, más 40.694 vehículos del tipo híbrido enchufable, que crecieron un 138 % respecto a un año antes.

Respecto a los nuevos vehículos registrados en 2020, se contabilizaron 58.628 unidades, lo que supone un incremento del 85 % en comparación a 2019, de los que el 60 % fueron vehículos 100 % eléctricos (35.045 unidades) y el 40 % híbridos enchufables (23.583).

Según Aedive, los datos reflejan el impacto que han tenido los planes de incentivos para la compra de vehículos eléctricos, además de constatar la necesidad de aumentar la red nacional de puntos de recarga.

De mantenerse esta tendencia en el largo plazo, la asociación calcula que la flota de aumentará hasta los 3,7 millones de vehículos en 2030, a pesar de que la tendencia de crecimiento se pueda reducir a lo largo del periodo por la disminución de incentivos para la compra, las limitaciones del uso del vehículo particular y el incremento del uso del vehículo compartido.

Sobre la red de puntos de recarga, al finalizar 2020 se contabilizaron 7.971 estaciones de acceso público en España, un 45 % más que hace un año, de los cuales solo 1.754 (un 22 %) cuentan con una potencia superior a 22 kilovatios (kW), lo que se considera como carga rápida.

Así, el ratio entre vehículos eléctricos y puntos de recarga es de 12 a 1, una cifra que pese a ser un 33 % mayor que al finalizar 2019, «demandará a corto plazo un incremento sustancial de las instalaciones de puntos de recarga de acceso público»