SEAT aprovechó el arranque del Mobile World Congress de Barcelona de este año para desvelar su visión del futuro de la movilidad urbana con la presentación del prototipo Minimó. Según la firma, este cuatriciclo 100% eléctrico, con un concepto similar al ya visto con el Renault Twizy, ha sido diseñado «como respuesta a los problemas de conducción en entornos urbanos y la normativa en materia de emisiones, el endurecimiento de las leyes de entrada de vehículos a las áreas urbanas, el aumento de los atascos o la falta de espacios de aparcamiento».

El Minimó, que reúne las ventajas de tamaño de las motocicletas y la seguridad y la comodidad de los turismos, minimiza las dificultades de los trayectos por la ciudad. Se trata de tamaño reducido que facilita los desplazamientos en zona urbana y, además, cuenta con un habitáculo cerrado y práctico que aporta seguridad y responde a las necesidades de un mayor número de conductores.

La firma no ha desvelado detalles técnicos de su propulsión 100% eléctrica, únicamente que ««resolverá el problema del acceso a los centros urbanos con las restricciones más severas en materia de emisiones». Para recargar el vehículo de forma rápida y eficaz, se puede cambiar la batería, así se reduce considerablemente el tiempo de carga en el caso de los clientes privados, y disminuyen los costes operativos para los servicios de uso compartido de coches eléctricos.

«El sector se está adaptando a la evolución del transporte personal de los clientes. La respuesta de SEAT a estas dificultades es el Minimó, una visión de nuestro primer producto diseñado para un fin específico. Combina tecnologías autónomas con sistemas de propulsión eléctricos; es el futuro de la movilidad urbana», afirma Luca de Meo, presidente de SEAT.

Diseñado para transportar a dos personas

El carácter híbrido del Minimó, que aúna las prestaciones de los turismos y las motocicletas, acentúa su finalidad principal: transportar a dos personas de forma cómoda con la menor huella posible.

Es un vehículo muy compacto, de 2,5 m de longitud y 1,24 m de ancho, que permite moverse por calles congestionadas y aparcar en los espacios más reducidos. Estas dimensiones compactas hacen que el vehículo ocupe 3,1 m2, mucho menos que un coche convencional (alrededor de 7,2 m2). A diferencia de otros vehículos urbanos, ofrece un manejo cómodo y agradable que permite un desplazamiento único por la vía urbana, ya que dispone de ruedas descubiertas de 17″, una posición del asiento similar a un SUV y una extraordinaria amplitud para los pasajeros.

Su habitáculo cerrado protege a los pasajeros y aporta seguridad; es una opción práctica para moverse por la ciudad en cualquier tipo de condiciones climatológicas.

El vehículo tiene un solo faro delantero que recuerda a las motocicletas, mientras que el diseño de la luz trasera es de inspiración aeronáutica, lo que acentúa su agilidad. El Minimó cuenta con un diseño dinámico, pero también práctico.

Las puertas, asimétricas y batientes, se pueden abrir en los espacios más ajustados. La puerta situada a la izquierda del conductor, de menor tamaño, cede espacio a las lunas del vehículo para mejorar la visibilidad de los pasajeros, mientras que la puerta derecha, de mayor tamaño, facilita la entrada y salida del vehículo.

Las baterías de alta densidad de energía del Minimó ofrecen una autonomía superior a 100 km con una sola carga, pero una vez agotada la energía, no es necesario esperar varias horas a que se recargue el vehículo. Dado que la batería está ubicada en un espacio accesible, bajo el suelo del vehículo, SEAT plantea la posibilidad de realizar el cambio por otra cargada en cuestión de segundos, y continuar el trayecto más rápido que otros vehículos.

Comodidad para el conductor y el pasajero

El interior del Minimó se caracteriza por la amplitud de espacio. Cuenta con un diseño que maximiza el tamaño, la luminosidad y el atractivo de la cabina, en un vehículo con una huella poco mayor que una motocicleta.

Dispone de un habitáculo con un asiento 1+1 con el mismo espacio para conductor y pasajero. La distancia entre el centro de gravedad del conductor y el pasajero es idéntica a la del SEAT Mii, mientras que la distancia entre los ocupantes y la puerta es mayor que en el actual SEAT Ibiza.

Cuando el Minimó se conduce en solitario, se dispone de gran amplitud para el equipaje, puesto que el asiento trasero está integrado en el espacio interior. Esta capacidad aporta un sentido práctico al vehículo e inspira posibles usos futuros para el Minimó como otro tipo de vehículo, sin pasajero.

Incluye soluciones de conectividad que proporcionan al usuario (de uso privado y compartido) una experiencia digital, basada en tecnología Android Auto inalámbrica y de llave digital. La pantalla digital central, situada tras el volante, combina las funciones de panel de instrumentos y contenido digital del smartphone del usuario con los requisitos de seguridad de conducción, mediante el Asistente de Google en Android Auto, el conductor puede centrarse en la carretera y mantener sus manos en el volante mientras interactúa con su voz con el vehículo para obtener respuestas, gestionar tareas y controlar los diferentes medios.

Según el anuncio de la firma, se trata de una plataforma lista para incorporar los avances futuros. El Minimó estaría preparado para el futuro de las tecnologías autónomas de nivel 4, que permitirán que el vehículo recoja al usuario cuando este lo solicite: la solución a una de las principales desventajas que tienen los coches compartidos para el usuario.