Más de 700.000 españoles se han incorporado al uso de la bicicleta y más de 370.000 se han iniciado en el patinete en las ciudades durante la pandemia, por lo que a lo largo del último año más de un millón de personas han apostado por medios de movilidad más sostenibles.
Una tendencia que ha venido para quedarse, puesto que más de 2,3 millones de ciudadanos se plantean utilizar la bici el próximo año y casi 1,5 millones el patinete.
Estos potenciales usuarios se concentran, sobre todo, en las ciudades de más de 100.000 habitantes. Por comunidades autónomas, Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía son las comunidades donde la bicicleta y el patinete despiertan mayor interés.
Son algunas de las principales conclusiones del estudio «La bicicleta y el patinete en tiempos de pandemia en las zonas urbanas españolas», realizado por la Red de Ciudades por la Bicicleta y presentado este martes en el Congreso Nacional de Medio Ambiente (Conama).
El estudio, realizado el pasado mes de abril mediante 1.500 encuestas telefónicas a ciudadanos de entre 16 y 65 años de municipios de más de 25.000 habitantes, constata que alrededor de 7,7 millones de españoles han usado la bicicleta en las ciudades durante la pandemia y 1.333.000 el patinete.
Estos datos están en consonancia con el «importante» incremento que se ha producido en la compra de bicicletas: en torno al 45 % respecto a 2019, según ha señalado el presidente de la Red y vicepresidente de Movilidad, Transporte y Sostenibilidad del Área Metropolitana de Barcelona, Antoni Poveda.
«Ante el crecimiento de su uso, es nuestra obligación seguir mejorando y ampliando las infraestructuras y los servicio», ha señalado el presidente de la Red, que representa a más de 1.000 municipios de todo el país de todos los tamaños.
El estudio destaca que en este último año las personas que se han incorporado al uso de la bicicleta han contribuido a reducir la brecha de género. Así, el 60,1 % de los nuevas incorporaciones son hombres y el 39 % mujeres frente a un 63 y 37 % de usuarios habituales.
Por otro lado, apunta a que no parece existir brecha de género entre los usuarios de patinete, aunque durante la pandemia su uso ha crecido entre ellas: el 63,3 % de los que han hecho por primera vez son mujeres.
Los nuevos usuarios de la bicicleta se reparten de forma más homogénea en ciudades grandes y pequeñas, mientras que los del patinete se concentran en las grandes urbes (más del 80 % en las de más de 100.000 habitantes).
Según la encuesta, un 25 % de los usuarios de bicicleta la han utilizado para ir a trabajar o al centro de estudios, un 34,3 % la usan regularmente para hacer desplazamientos cotidianos y la mitad para pasear o hacer deporte.
En cambio, el uso del patinete está más ligado a la movilidad obligada. En general, un 29,8 % lo hacen para ir a trabajar o a estudiar, un 58,4 % para desplazamientos cotidianos y un 29,6 % para pasear.
En cuanto al perfil de los nuevos usuarios, el 47 % de los que se han iniciado en la bicicleta tienen entre 25 y 39 años; el 42 % en el caso del patinete.
Durante la pandemia, los vehículos sostenibles han sustituido al vehículo privado motorizado, de tal forma que un 31,2 % de los nuevos usuarios lo han cambiado por la bicicleta.
En el caso del patinete, éste ha sustituido, en primer lugar, a caminar (33,9%), y, en segundo lugar, al uso del transporte público (40,2 %).
Durante la presentación del estudio, el director del Observatorio Nacional de Seguridad Vial de la Dirección General de Tráfico (DGT), Álvaro Gómez ha asegurado que frente a estas cifras, las administraciones tienen que responder con políticas.
Tras precisar que aumentar los usuarios a pie y en bicicleta es un objetivo recogido en la Estrategia de movilidad, ha asegurado que también va a aparecer en la Estrategia de la bicicleta que el Ministerio de Transportes va a presentar en los próximos días.